La disminución de contagios en los últimos días ha llevado a la Junta de Andalucía a reducir de 14 a 7 días la revisión de la tasa de incidencia para decidir qué municipios deben prohibir la movilidad externa y cerrar su actividad no esencial.
Asimismo, también se va a reducir de dos a una las reuniones semanales para revisar los datos de coronavirus. A partir de ahora, los consejos territoriales se verán los jueves y las restricciones entrarán en vigor los sábados.
Según el presidente andaluz, Juanma Moreno, “el objetivo es ser más operativos y prácticos para que los ciudadanos se puedan planificar con las medidas”.
No obstante, los parámetros de incidencia no cambian. Las localidades con una tasa superior a los 500 casos por 100.000 habitantes deberán clausurar sus fronteras, mientras que los municipios con una tasa superior a los 1.000 enfermos tendrán que cerrar también su actividad no esencial.