El pasado 1 de julio entró en vigor la nueva 'ley del
pan'. Este decreto, que sustituye al creado en 1984, hace ya 35 años, viene a
crear un marco de calidad respecto a la producción de este producto básico,
ajustando la normativa a las actuales demandas del mercado, con el fin último
de proporcionar mayor seguridad al consumidor.
María José Gómez, portavoz de la Asociación de
Consumidores Al-Andalus, ha pasado por nuestro magazine, donde ha explicado qué
va a cambiar con esta nueva ‘ley del pan’.
Hasta ahora, los panes integrales, de centeno, harinas
diferentes a la de trigo o bajos en sal se gravaban con un 10%. Con esta nueva
orden, que propicia una mayor diversidad de panes, se pagará un IVA
superreducido del 4%.
Y no es sólo lo que esta permuta va a beneficiar al
bolsillo, sino también al paladar y la salud. Para ello, todos los panes han de
ser elaborados con una masa madre que asegure la fermentación de la masa del
pan.
Los establecimientos sólo podrán vender este pan del día
en las 24 horas siguientes a su cocción. De no ser así, debe advertirse.